4 enero, 2021
Hoy os traemos una historia preciosa, por muchos motivos. Podría ser una historia de amor más, pero esta es muy peculiar. Guarda detalles que la hacen muy especial. El primero de ellos es el tiempo récord en que se ha hecho el anillo y sobre todo, el tiempo récord de búsqueda del diamante deseado. El segundo, es que se trata de una pareja especial con una atracción hacia las joyas diferentes y juveniles. Y el tercero, es que es una pedida de mano en Navidad.
Alejandro, nuestro protagonista en esta entrada, acudió a nosotros por mediación de sus padres, excelentes clientes y mejores personas. Buscaba un anillo singular y diferente para obtener el ‘Sí, quiero’. Tras su primera visita a la joyería, estuvimos dilucidando lo que podría ser el anillo perfecto para ella. Una chica con un gusto por las joyas grandes y étnicas necesita algo muy especial para sorprenderla. Y Alejandro lo sabía.
De seguida dibujamos el concepto de lo que sería su anillo: formas impetuosas, diseño bulboso y ergonómico, a la vez que práctico. En definitiva, debería de ser un anillo único para un estilo concreto. Algo que se saliera de lo común y que a la vez fuera fácil de usar. Y nosotros lo tuvimos claro: recurrimos a nuestro diseño de anillos “de petaca”, que tan popular hicimos con nuestra exclusiva serie limitada “Fantasía” (como éste).
Se trata de un anillo de forma ‘cushion’, sin aristas ni ángulos, cuyas formas orgánicas siempre lo hacen cómodo. Se compone en sí de una doble estructura unida por los flancos, y con sendos refuerzos arriba y abajo. Un auténtico ejercicio de estilo, diseñado por 3D y ejecutado por microfusión. Y es que gracias a la tecnología 3D, en Gutiérrez Joyeros somos capaces de cuidar cada detalle, concibiendo una joya exclusiva, como es este anillo de compromiso. Además, el cliente puede tutelar en cada momento el estado de fabricación de su joya.
(primera propuesta enviada a Alejandro, y la elegida por él, salvo por el diamante lateral que al final fue eliminado del diseño)
(cera impresa del que sería el anillo que saldría del cilindro de la micro-fusión)
Al final, y una vez aprobado por Alejandro el que sería su anillo de compromiso, procedimos a imprimir la cera. Y ya conocéis, como tantas veces os contamos en este blog, el proceso: cera, montado del árbol, micro-fusión, desbarbe, y engaste del diamante. En este caso, Alejandro lo tenía claro: habría de ser un diamante de excepcional color, ante todo. Así pues le conseguimos un diamante de 0.43Cts, color D, y triple Excellent.
(una vez fundido, se desbarba y libera de sus asperezas y bebederos para quedar listo ante el diamante del que será custodio)
Esperamos que esta preciosa historia de amor se forje y gire en torno a este anillo de compromiso: una joya con un significado enorme pues supone el paso más importante en la pareja. Rumbo a la boda, ¡Sí, quiero!
Con nuestros mejores deseos, ¡FELIZ 2021!